La antigua Jericó
Se piensa que Jericó, en la actual Israel, fue una de las primeras ciudades del mundo y su historia se remonta hasta aproximadamente 10.000 años a.C. Aparece en la historia por primera vez en la Biblia, donde vemos cómo sus muros caen ante el sonido de las trompetas del ejército de Josué, un acontecimiento fechado en torno al año 1200 a.C. La ciudad de Jericó es una colina (o tell en árabe) en el margen occidental del valle del río Jordán, cerca del mar Muerto. Se encuentra cerca de Ain Musa, una fuente perpetua que en ocasiones se conoce como la Fuente de Moisés. Cuando en la década de 1950 la arqueóloga británica Kathleen Kenyon excavó el yacimiento, atravesó numerosos estratos, apilados los unos sobre los otros, cada uno de ellos con los restos de un poblado o ciudad antiguos. En el último de ellos, al fondo del todo, encontró un pequeño poblado que fue ocupado por primera vez hace casi 12.000 años. Los primeros habitantes de Jericó no eran verdaderos granjeros, pues cazaban anima